Pimientista, a ti que te encantan los pimientos, tenemos varias recetas para que no dejes de disfrutar de este vegetal en formato de paté. Un manjar que cautiva los paladares con su sabor inconfundible y que es especialista en darle sabor y personalidad a otros alimentos.
Pero lo primero de todo, vamos a presentarte esta nueva textura que elaboramos con el fin de no desperdiciar ese exceso de pimientos que cultivamos en las huertas abandonadas con el propósito de reactivar las áreas rurales. Otro detalle interesante es que estos pimientos los asamos en la conservera en restos de poda de olivos centenarios, lo que le da el toque de sabor único, impregnándolos con el aroma de la tierra y la historia que abraza esta región con el aceite de oliva virgen extra, otra joya de la zona.
Acompañamientos que complementa a la perfección
Ahora que hemos hablado de la maravilla de elaboración del paté de pimientos, es momento de explorar las diversas formas en que puedes disfrutarlo al máximo.
Pan Fresco y Crujiente: No hay mejor manera de disfrutar el paté de pimientos que untándolo generosamente sobre una rebanada de pan recién horneada. La combinación de sabores y texturas es simplemente deliciosa.
Cualquier queso: Una explosión de sabores y texturas. La opción perfecta para un picoteo.
Carne o pescado a la brasa: ¿Eres un amante de las carnes? Este paté se complementa perfectamente con carnes o pescados a la brasa u horno, como pollo o merluza. Una opción para ese toque de sabor mediterráneo.
Ensaladas Creativas: Transforma tus ensaladas en platos gourmet al incorporar el paté de pimientos como aderezo. Su sabor único aportará una dimensión extra a tus creaciones culinarias.
Las chicas de la conservera no han podido resistirse a contar como lo combinan ellas.
Como ves su versatilidad a la hora de combinarlo con otros alimentos lo convierte en un ingrediente indispensable en cualquier despensa. Así que, ¿por qué no añadir un poco de pedazos de pueblo a tu próxima comida?